miércoles, 11 de febrero de 2009

EN MI HABITACIÓN



Aquí están mis zapatos, con la forma
de los pasos y el pie que los dispone.

Aquí están mis vestidos, mis blusas y mis faldas
y mi ropa interior,
liviana y sencilla como una campánula silvestre
ya marchita,

mis medias que olvidaron las orugas
y han conocido antes la máquina y el ruido,
y después el latido y la huella;
mi paraguas, lánguido capullo, calabaza
del color del durazno y la cayena,

oh, mi mejor amigo defendiéndome
del cielo y su arrebato.

Espejos, libros, memorias de los viajes,

la música viniendo desde lejos,

su posada mariposa libérrima,

un lecho donde el sueño sólo es más sueño,

una lámpara antigua de la abuela materna,

una diversa advocación de vírgenes y santos
para la belleza y por los hijos, para la soledad,

esta máquina de escribir que llena de picotazos el silencio

como una gaviota furiosa y hambrienta

contra la huidiza verdad del mar,

este olor que de pronto se viene del jazmín
del jardín, desde la calle

a pelear contra el mío y mis perfumes

saliéndose de mí o del armario abierto.

Y retratos.

Y la vida haciendo ruido adentro y en torno

en cada día que pasa.

Luz Machado (1916-1999)
De su libro La casa por dentro (1965)